Nuestro territorio cuenta con abundantes recursos patrimoniales de tipo natural y cultural que deberían ser el principal motor de su economía.
Todos estos recursos precisan tanto de protección como de mecanismos que permitan que sean susceptibles de ser aprovechados de forma sostenible y reportar beneficios económicos.
Sin embargo, este territorio, eminentemente rural, presenta una serie de problemáticas que con el paso del tiempo fueron desembocando en la existencia de comunidades rurales y urbanas cada vez más despobladas, con una economía deprimida y dificultades de recuperación. Pensamos firmemente que en la recuperación de esta economía juegan un importante papel el sector primario y el sector servicios a través de relaciones km0 y de calidad.
Para fomentar todo esto nace la Oficina de Intervención Rápida, para la protección y puesta en valor de nuestros recursos.